"Cuídate, que te voy a cuidar"
No estaré todo el tiempo contigo, ni olvidaré que un mundo existe fuera de mis atenciones. Buscaré un momento en el que logre respirar mi propio aire, pero te prometo que me cuidaré, porque ahora cuidarme será cuidarte.
Como cuidadores, uno siempre quiere dar el 120% de lo que puede, porque siempre considera que lo que haga es poco en comparación con lo que podría hacer.
Esta entrega deriva, en ocasiones, en situaciones y riesgos excesivos que perjudican, seriamente, al bienestar del cuidador y los éxitos que pueda observar en los cuidados que presta a la persona dependiente.
En muchas ocasiones cuidamos por encima de nuestras posibilidades. Asumimos una carga de tareas y responsabilidad excesiva, olvidando las herramientas que se encuentran a nuestra disposición (tanto personales como institucionales).
Somos válidos, si, pero el resto de nuestros familiares también. No es bueno no aprovechar toda la ayuda disponible. Que nuestros familiares no hagan las cosas tal como nosotros lo hacemos no significa que no lo hagan bien.
Aquí es cuando, nos olvidamos de nosotros mismos y de realizar acciones que favorezcan nuestro estado de salud y bienestar, porque consideramos que debemos cuidar a nuestro dependiente y no a nosotros mismos, lo que nos desvía de realizar actividades que prevengan las enfermedades y el generar una posterior dependencia. Dentro de este punto se encuentra la perdida de tiempo de descanso disponible, lo que nos hace no estar al 100% cada día (no olvidando que esto puede derivar en un cuidado no adecuado o del todo satisfactorio).
Por supuesto, otro de los riesgos en los que caen los cuidadores es el descuidar la alimentación propia, así como olvidar la práctica de algún ejercicio.
No podemos olvidar la existencia de riesgos al restar importancia a nuestra propia salud. En ocasiones, un cuidador prefiere no atender a posibles síntomas que puedan estar afectándole a su salud para centrarse en los síntomas que sufra su familiar, olvidando la importancia de preservar su salud como medio necesario para atender adecuada y satisfactoriamente a la persona dependiente.
Debemos asumir que los cuidados que nos proveemos a nosotros mismos son tan importantes como aquellos que pueda recibir, de nuestra parte, nuestro familiar. Tengamos en cuenta que cuidar de nosotros mismos es la mejor manera en la que nos encontraremos capacitados para atenderlo, pues evitaremos vernos aquejados por dolores, emociones, enfermedades, etc., que puedan impedir o reducir nuestras atenciones y la calidad de las mismas, provocando, a su vez, una mayor satisfacción en el cuidador.
A continuación, veremos una pequeña lista de actividades, muy fáciles de realizar, que pueden resultar útiles en la mejora emocional y física de nuestros cuidadores.
Ejercicios de respiración consciente: La respiración posee el poder de cambiar, rápidamente, el estado de ánimo. Ser consciente de la propia respiración. Debemos realizar 4-8 respiraciones profundas, abdominales. Colocaremos nuestra mano en el abdomen y trataremos de llevar el aire a ese punto. Tomaremos aire, profundamente por la nariz, tratando de inflar nuestro abdomen. Luego lo soltaremos lentamente. Trataremos de ser conscientes de cada inspiración y espiración concentrándonos, solamente, en la maniobra.
Por supuesto, otro de los riesgos en los que caen los cuidadores es el descuidar la alimentación propia, así como olvidar la práctica de algún ejercicio.
No podemos olvidar la existencia de riesgos al restar importancia a nuestra propia salud. En ocasiones, un cuidador prefiere no atender a posibles síntomas que puedan estar afectándole a su salud para centrarse en los síntomas que sufra su familiar, olvidando la importancia de preservar su salud como medio necesario para atender adecuada y satisfactoriamente a la persona dependiente.
Debemos asumir que los cuidados que nos proveemos a nosotros mismos son tan importantes como aquellos que pueda recibir, de nuestra parte, nuestro familiar. Tengamos en cuenta que cuidar de nosotros mismos es la mejor manera en la que nos encontraremos capacitados para atenderlo, pues evitaremos vernos aquejados por dolores, emociones, enfermedades, etc., que puedan impedir o reducir nuestras atenciones y la calidad de las mismas, provocando, a su vez, una mayor satisfacción en el cuidador.
A continuación, veremos una pequeña lista de actividades, muy fáciles de realizar, que pueden resultar útiles en la mejora emocional y física de nuestros cuidadores.
Ejercicios de respiración consciente: La respiración posee el poder de cambiar, rápidamente, el estado de ánimo. Ser consciente de la propia respiración. Debemos realizar 4-8 respiraciones profundas, abdominales. Colocaremos nuestra mano en el abdomen y trataremos de llevar el aire a ese punto. Tomaremos aire, profundamente por la nariz, tratando de inflar nuestro abdomen. Luego lo soltaremos lentamente. Trataremos de ser conscientes de cada inspiración y espiración concentrándonos, solamente, en la maniobra.
- ¿Cuáles son los beneficios de los ejercicios de respiración consciente?
-Recuperación del equilibrio mente-cuerpo.
-Mejor manejo de las emociones.-Disminuyen miedos y temores.
-Mejora de las funciones del organismo.
-Incrementa la creatividad.
-Aumento de la capacidad de concentración.
-Fortalece el sistema inmunitario.
-Mejora la salud en general.
- ¿Cuáles son los beneficios de una respiración profunda?
-Aumenta la cantidad de sangre, debido a su mayor oxigenación en los pulmones. Esto favorece la eliminación de toxinas del sistema.
-Mejora la capacidad del cuerpo para digerir y asimilar alimentos. Los órganos digestivos reciben mayor cantidad de oxígeno y así funcionan más eficazmente.
-Mejora nuestro sistema nervioso, que a su vez se comunica con todas las partes de nuestro cuerpo.
-Beneficia al cerebro. Esta parte de nuestro cuerpo requiere tres veces más que el resto del cuerpo, lo cual genera un impacto sobre nuestro bienestar.
-Mejora nuestra piel.
-Masajea nuestros órganos. A través de los movimientos del diafragma.
-Previene de problemas respiratorios, pues nuestros pulmones logran ser sanos y fuertes.
-Reduce la carga de trabajo del corazón.
-Ayuda a controlar el peso. Si padece sobrepeso el suministro extra de oxígeno ayuda a quemar las grasas. Si tiene insuficiente peso, el oxígeno alimento a los tejidos y glándulas.
-Relaja nuestro cuerpo.
-Relajación mental. Una mayor oxigenación del cerebro tiende a normalizar la función cerebral, reduciendo los niveles excesivos de ansiedad.
Realizar meditación: Veamos un vídeo corto que puede sernos útil en este aspecto. La Meditación en un Minuto.
La meditación reporta visibles cambios en las zonas del cerebro relacionadas a la memoria, la auto-conciencia, la compasión y el stress.
Un estudio realizado por la Universidad de Yale, EE.UU. asegura que una meditación profundamente ayuda a combatir los pensamientos negativos y la ansiedad y "desconecta" las áreas cerebrales relacionadas con el autismo y la esquizofrenia.
Si bien la meditación requiere práctica los beneficios ya comienzan a observarse en apenas una semanas. Veamos cuales son.
- ¿Cuáles son los beneficios de la meditación?
-Relajación física. Reduce nuestra tensión física y mental. Se eliminan los malos hábitos de la tensión física y los sobreesfuerzos. La persona que medita es consciente de su cuerpo, hasta el punto de saber percibir la tensión y lograr relajarse.
-Mayor consciencia sobre los procesos del pensamiento. Los pensamientos, una vez llegan, no se pueden interrumpir o eliminar, pero gracias a la meditación esos pensamiento no inquietan ni perturban a la persona y esta no se encuentra atada a ellos.
-Tranquilidad creciente y capacidad para superar el estrés. Igual que ocurriera con los pensamiento, se obtiene el mismo resultado con las emociones. No quiere decir que no sienta ira o enfado, significa que no deja que estas se apoderen de la persona, sabiendo encauzarlas y logrando estabilizarlas.
-Desarrollo de la consciencia. Es la capacidad de darnos cuenta de lo que sucede a nuestro alrededor y saber desviar nuestra atención de una cosa a otra, en lugar de perdernos en diálogos internos.
-Marcada mejoría del sueño y, con él, unidas las ventajas de un buen sueño. -Fomento de la autocomprensión.
-Desarrollo del pensamiento creativo. La creatividad implica acceder a niveles inconscientes de la mente, donde nacen los pensamientos originales. Cuanto más sosegada esté nuestra mente consciente más fácil accederemos a ella.
-Desarrollo de la memoria. La mayoría de nuestros olvidos se deben a la incapacidad de prestar atención a lo que sucede a nuestro alrededor, de lo que hacemos y, como consecuencia, para almacenarlo en nuestro banco de memoria.
-Mejoras de salud. Aunque varía de una persona a otra, en general, puede reducir la tensión arterial
No es necesario estar sentado en un almohadón para desarrollar la meditación, en realidad la postura corporal no es lo más importante. Lo primordial es nuestro estado mental, aunque estar sentado con la espalda recta ayuda a mantener la atención, que si constituye una parte fundamental en la meditación.
Estiramientos musculares globales: de la columna vertebral, la zona cervical y de la zona lumbar.
Visualizaciones: Trataremos de imaginarnos situaciones que nos resulten relajantes. Por ejemplo, relajados, sentados o tumbados, en un ambiente tranquilo, casi de silencio o con música relajante, pensar que nuestro cuerpo es todo de cristal, transparente y visualizar cómo poco a poco se va llenando de pintura de colores, azul, los dedos de los pies, los pies, los tobillos...lentamente. Es recomendable haber realizado unos ejercicios de respiración previamente, para encontrarnos tranquilos y relajados. Y que para salir de la visualización se haga muy lentamente, comenzando por mover los dedos de los pies y las manos, para luego ir, poco a poco, moviendo el resto del cuerpo.
Otras visualizaciones pueden ser:
- El cuerpo humano: Es para recorre nuestro cuerpo, reconociéndolo y percibiéndolo. Un viaje de cabeza a pies. Poco a poco visualizamos como avanzamos por cada parte de nuestro cuerpo, cada órgano, cada miembro, cada músculo y nos podemos detener en aquellas zonas que nos producen malestar o están dañadas. Nos centraremos en ella y nos imaginaremos como cura, tratando de enviar energía hacia esa zona de nuestro cuerpo. Visualizaremos, también, como viaja la sangre a través de nuestras venas y arterias, como late nuestro corazón, como llega el aire a nuestros pulmones, etc. Llegaremos hasta los pies, primero visualizando una pierna, luego la otra. Por último, regresaremos hasta la cabeza y si aún sentimos tensión en alguna zona trataremos de centrarnos en ella para poder relajarla poco a poco.
- De hormiga a gigante: se realiza un recorrido por un bosque de árboles grandísimos, la brisa está a nuestro alrededor y nos llena de sonidos hermosos. Nuestro camino, poco a poco, se va convirtiendo en un sendero, cada vez más estrecho que hace que nosotros nos hagamos cada vez más pequeños, casi del tamaño de una hormiga. A nuestro alrededor todo parece grandísimo, las hojas de los árboles, el césped, los pajaros pequeños ahora nos parecen grandes. Las ramas caídas de un árbol ahora son enormes troncos en el suelo. Observamos todos los detalles y comenzaremos a jugar con los animalitos que nos rodean, unas hormigas, las crías de un pajarito, etc. No nos hacen daño a pesar de lo pequeños que somos, nos protegen. Seguimos caminando por el sendero que se va haciendo cada vez más y más grande y nosotros vamos creciendo con él, hasta que nos convertimos en gigantes. El sendero nos lleva a un pueblo donde todos sus habitantes parecen hormigas a nuestro lado. Tratamos de jugar con ellos, no le hacemos daño, los mimamos, los cuidamos, ellos no nos tienen miedo. Al final continuamos nuestro camino y nos damos cuenta que a cada lado nos acompañan dos hermosos pájaros que nos ayudan a elevarnos en el aire y nos llevan de regreso a casa.
- Esto son sólo unos ejemplos de visualizaciones, pero puedes encontrar más en: Métodos de relajación y visualizaciones. // Técnicas de Visualización
Automasajes: realizados por la nuca y el cuero cabelludo.
Baños calientes con aromaterapia: la aromaterapia trabaja a partir de aceites esenciales, derivados de plantas y flores, y tienen la facultad de transformar nuestras emociones, y bien escogidos y aplicados, pueden curar nuestro cuerpo. Trata nuestro cuerpo físicamente, pero no podemos olvidar sus acciones también a nivel mental. Las esencias nos ayudan a relajarnos tras un largo día de tensión, procurar hacernos recuperar energías, levanta nuestro ánimo, etc.
Escuchar música: Escuchar nuestra música preferida puede ser bueno para nuestro sistema cardiovascular, según investigadores de la Universidad de Maryland Escuela de Medicina de Baltimore. Así las emociones suscitadas por la música alegre tienen un efecto saludable en los vasos sanguíneos.
- ¿Cuáles son los beneficios de la aromaterapia?
-Reduce el dolor muscular y promueve la relajación.
-Ayuda a eliminar contracturas.
-Reduce los dolores de cabeza.
-Equilibra la presión sanguínea.
-Mejora la salud de nuestra piel.
-Mejora las funciones respiratorias.
Escuchar música: Escuchar nuestra música preferida puede ser bueno para nuestro sistema cardiovascular, según investigadores de la Universidad de Maryland Escuela de Medicina de Baltimore. Así las emociones suscitadas por la música alegre tienen un efecto saludable en los vasos sanguíneos.
- ¿Cuáles son los beneficios de escuchar música?
-Reduce el dolor: reduce el dolor crónico hasta en un 21%. Nos ayuda a liberar endorfinas, que actúan como analgésicos naturales, que, además, ayuda a aumentar la felicidad y a disminuir la depresión.
-Nos aísla del estrés. Escuchar música suave, aunque sea dos veces por semana, reduce nuestro estrés.
-Refuerza la salud: La música suave ayuda a reducir la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
-Invita a socializar: la música une a personas que comparten gustos similares.
-Hace de medicina emocional: La música "amansa a las fieras", nos ayuda a tener autocontrol, mejora el poder de seducción y vence la timidez.
-Estimula el cerebro: Los ritmos fuertes hacen que la concentración permanezca más aguda y los pensamientos más alerta. La música suave, por otra parte, mejora la capacidad de concentrarse más tiempo.
-Aumenta el rendimiento: La música elimina la sensación de fatiga, cansancio y aburrimiento y actúa como estimulante que aumenta la productividad. Prueba a escuchar música mientras haces ejercicio.
-Facilita el sueño: Escuchar música de baja frecuencia induce a la relajación, y facilita y mejora el sueño.
-Aumenta el optimismo: Nos hace recordar momento felices, aumenta nuestra autoestima y nuestra autoconfianza.
Recuerda, cuidador, que estás son sólo algunas de las actividades que pueden ser saludables para nuestra salud y nuestra intención de prevenir cualquier falta de salud que impida nuestro desempeño y atención hacia nuestro familiar, pero sin duda hay muchas otras actividades que pueden ayudarnos a hacer que nuestra vida sea plena y nos permita evitar generar nuestra propia dependencia. Ir al cine, al teatro, socializar, leer, hacer crucigramas, realizar pequeñas caminatas diarias, etc. Hay un gran abanico de actividades esperándote ahí fuera, dispuestas a ayudarte en tu actividad diaria.